Ayer, cuando debía reunirse la comisión, primeramente lo hicieron los miembros del oficialismo. De acuerdo a lo que se conoce, en ese encuentro previo se informó que Figueroa Castellanos era el presidente. Luego entraron los opositores y se avanzó con el análisis de los proyectos en un clima de extrema tensión. Pasaron los minutos y algunos diputados del oficialismo comenzaron a levantarse, después lo hicieron los radicales y la Comisión quedó sin quórum.
Pero el malestar con la imposición no quedó solo en los miembros no corpaccistas de la comisión, sino que se extendió a otros legisladores del bloque que no responden a la senadora nacional, que ya vienen molestos con algunas decisiones de parte de las autoridades de la Cámara.
En el bloque, además de los «corpaccistas», hay diputados que responden al intendente Gustavo Saadi, al gastronómico Luis Barrionuevo, al ministro de la Vivienda, Fidel Sáenz, y a la Renovación Peronista (espacio que tenía como referente al exministro de Gobierno Jorge Moreno y al actual presidente de YMAD, Fernando Jalil).
En este contexto y por estas horas se hablaba de que el bloque podría partirse y conformarse un «interbloque» donde exista otra expresión que defienda al Gobierno provincial de las críticas de la oposición pero que no tenga que responder a ninguna imposición.
Ésta no es la primera vez que la unidad en el bloque oficialista se vio comprometida. Ya en 2020, el bloque oficialista tenía un grupo de diputados «díscolos» encabezados por Verónica Mercado, que si bien defendía a la gestión provincial, había ocasiones en la que no votaba junto a la mayoría oficialista.
Tampoco es la primera vez que salen a la luz molestias de algunos diputados oficialistas con la conducción de la Cámara y del bloque.