Sierra Space es una empresa privada de tecnologías aeroespaciales que diseñó, fabricó y probó con éxito su primera estructura de estación espacial en enero. Esta innovación, bautizada como Large Integrated Flexible Environment (LIFE, por sus siglas en inglés), son telas tejidas que actúan como una estructura rígida una vez infladas, se desarrolló para ver cuánta presión puede soportar en el espacio y se puso a prueba a principios de año para demostrar si es viable de cara a vivir y trabajar en el espacio.
Durante el experimento mencionado, la prueba marcó la resistencia de la estructura inflable a tamaño real hasta que explotó por la presión, teniendo en cuenta que los resultados superaron los niveles de seguridad recomendados por la NASA en un 27%. No obstante, para demostrar que LIFE será un hábitat seguro en un futuro, una prueba reciente demuestra que la estructura reventó después de superar los niveles de seguridad x4 recomendados por la NASA en un 22%.
Concretamente, esta agencia espacial afirma en un comunicado que Sierra Space «completó recientemente una prueba de presión de ruptura máxima a gran escala como parte de los esfuerzos de la agencia para encontrar nuevos destinos en la órbita terrestre baja».
Así fue la segunda explosión de LIFE
Los equipos realizaron la prueba de explosión en la estructura del hábitat LIFE de Sierra Space utilizando las capacidades de prueba del Centro Marshall de Vuelos Espaciales de la NASA en Huntsville (Alabama, Estados Unidos)
El hábitat inflable estaba fabricado con correas y tela de alta resistencia que formaban una estructura sólida una vez presurizada, además, las múltiples capas de materiales blandos que componían la carcasa se almacenaban de forma compacta en un carenado de carga útil y se inflaban cuando estaban listas para su uso.
Por otro lado, la presurización durante la prueba demostró las capacidades del hábitat y proporcionó datos críticos que respaldan las pautas de certificación de productos blandos inflables de la NASA.
Angela Hart, directora del Programa de Desarrollo de Órbita Terrestre Baja Comercial de la NASA en el Centro Espacial Johnson de la agencia en Houston, apunta en el comunicado que «se trata de una prueba emocionante de Sierra Space para Orbital Reef, que demuestra el compromiso y la capacidad de la industria para desarrollar tecnologías y soluciones innovadoras para futuros destinos comerciales. Cada hito de desarrollo exitoso de nuestros socios es un paso más para lograr nuestro objetivo de permitir destinos comerciales en órbita terrestre baja y expandir el mercado de la órbita terrestre baja».
Apúntate a nuestra newsletter y recibe en tu correo las últimas noticias sobre tecnología.