El fin de semana más de 7 mil personas asistieron y disfrutaron de la XXXI Fiesta del Niquixao, en El Rodeo. El sol acompañó toda la jornada del viernes 25 de mayo en Ambato y una cartelera de convocantes artistas hicieron que esta edición de la fiesta marcara récord de público.
Desde el mediodía y con entrada gratuita, la gente empezó a poblar el polideportivo municipal para compartir el tradicional locro que prepararon los empleados de la comuna. “Preparamos 13 mil litros y no quedó nada”, contó Walter, uno de los trabajadores que estuvo a cargo de esta tarea. Los ranchos que ofrecían otras comidas tradicionales también trabajaron a pleno durante toda la jornada.
Con la conducción de Darío Lucena y Gabriel Guía, la fiesta fue creciendo en ritmo, entusiasmo y convocatoria, a medida que más personas llegaban con sus reposeras y sus equipos de mate para disfrutar del día patrio.
Diego Sierralta, cantor catamarqueño, fue el encargado de abrir la fiesta. Federico Miranda puso en movimiento a los bailarines con su propuesta folklórica de repertorio catamarqueño, al igual que Lucho Guzmán y René Andrada, cantores rodeínos que se llevaron los aplausos de su gente.
Los bailarines de las agrupaciones Despertar Gaucho y Danzar Norteño, de El Rodeo y Las Juntas, prepararon una puesta conjunta que incluyó un celebrado Pericón Nacional, con encendidos contrapuntos de coplas picarescas entre los bailarines.
Desde la ciudad de La Plata, pero haciendo honor a las raíces santiagueñas de uno de sus integrantes, Los Chaza llegaron por primera vez a El Rodeo para ofrecer su repertorio basado en la gran obra de Andrés Chazarreta. La calidad interpretativa y el selecto repertorio ofrecido por los músicos platenses pusieron otra vez de pie a los bailarines que, a esa altura de la tarde, tenían que hacerse lugar en la cancha del polideportivo.
La Municipalidad de El Rodeo volvió a confiar en Carafea Producciones para la organización de la Fiesta del Niquixao, que este año contó con un escenario de grandes dimensiones y un despliegue técnico y escénico que permitió lucirse a los artistas.
Un poco antes de las 18 el dúo jujeño La Cantada, integrado por Néstor y Oscar González, salió a escena con un show que escaló con temas románticos hasta explotar en la alegría del carnaval. Con el bailarín y coreógrafo Yamil Ramos como estrella del show, todo el polideportivo bailó al son de El Coya Dance, Jujeño Soy, Carnavalito de Verano y, por supuesto, La llama que baila.
El cierre del escenario estuvo a cargo de Franco Barrionuevo y Los Changos. El cantor de Charata y sus músicos ofrecieron un show de gran solidez musical, llevando al público a un recorrido por zambas y chacareras que muchos bailaron y que todos acompañaron con su canto. “Penas y alegrías del amor”, “El Anacleto del viento”, “Déjame que me vaya”, “Zamba de la añoranza” y una versión de “Lágrimas Azules”, que compuso en homenaje a su compañero Luis Paredes, fueron parte del repertorio con el que Franco Barrionuevo se ganó el aplauso de pie y emocionado del público del Niquixao.
Ya con un cielo nocturno, la fiesta se despidió hasta el próximo año con un show de luces que encendió todo el cielo rodeíno.
Muchos asistentes, vestidos de gaucho y a caballo, se dieron cita y compartieron con los más chicos juegos tradicionales, como la cinchada. Para los rodeínos, el Niquixao es más que música y gastronomía, es un encuentro de hermandad de los pueblos del Ambato y una celebración de sus tradiciones.