El fiscal Marcelo Sago, que investiga la denuncia contra el senador de Santa Rosa, Julio Maza (FV), pidió al juez de Control de Garantías la investigación jurisdiccional para establecer si corresponde el desafuero o no. Y el fiscal Víctor Figueroa, en igual sentido, elevó el pedido por la denuncia contra el senador por Andalgalá, Juan Carlos Espinosa (FV). Ambos están para el análisis del juez de Control de Garantías Nº 1 Rodolfo Maidana.
El senador Maza fue denunciado penalmente por el ahora ex empleado legislativo Pablo Vega, quien reveló a la Justicia que debió entregar durante 20 meses $15 mil de su sueldo para conservar el trabajo que tenía en la Cámara de Senadores bajo las órdenes del acusado.
Pero en la maniobra también vinculó al actual concejal por Santa Rosa, Mario Orlando Páez (FV) a quien sindicó como el recaudador del dinero que era “exigido” a dejar por mes.
Legislatura CatamarcaVega comentó que cobraba un sueldo de $20 mil, por lo que luego de entregar los $15 mil a Páez, le quedaban poco dinero de sus haberes reales. Y en el caso de los aguinaldos, contó que debía entregar $5 mil. De hecho, el conflicto se dio cuando al cobrar la segunda cuota del SAC en diciembre de 2017, solo había podido entregar $3.800 por problemas económicos.
Esta situación habría derivado en una nueva amenaza de dejarlo sin trabajo en el Senado, por lo que Vega decidió realizar una presentación judicial. A fines de febrero, el Senado provincial dio de baja a Vega, quien era empleado de planta política.
Espinosa
En el caso de Espinosa, una mujer lo denunció penalmente por acoso sexual.
De acuerdo con el relato de la denunciante, Espinosa le habría realizado propuestas indecentes, mientras trabajaba con él, y sometido a tocamientos en sus partes íntimas.
A su vez, la misma mujer aseguró que el secretario privado del senador por Pomán, Héctor Fernández, le exigió sexo oral a cambio de ayudarla a conseguir trabajo. Todas las situaciones denunciadas por la mujer se habrían dado en la Cámara de Senadores.
Espinosa negó las acusaciones y dijo que nunca existió una relación laboral con la mujer, al margen de que reconoció que la conocía.
Aunque el senador Fernández no está vinculado a ninguna de las denuncias, salió en defensa de sus pares. «Parece que quieren atacar a los senadores, justo antes de que comiencen a pensar en una posible reelección», analizó el pomanisto.