Arabia Suadí continúa con las obras de la megaciudad The Line para unir el desierto con el golfo de Áqaba. En un principio, se espera que la primera fase del proyecto esté terminado en 2030, sin embargo, a mediados de abril, salió a la luz que la construcción sufrió un recorte de presupuesto porque los inversores rebajaron determinadas previsiones, como los ciudadanos que habitarían en la ciudad –pasando de una población de 1,5 millones de personas a unas 300.000– o los kilómetros prometidos del proyecto –rebajando a 2,4 kilómetros de los 170 kilómetros previstos–.
Por si fuera poco, The Line también se va a quedar sin su planta desalinizadora que prometía abastecer el 30% de las necesidades de agua previstas, además, un nuevo contratiempo pone en peligro que la megaciudad esté lista para dentro de seis años. Según el diario ShippingWatch, el acuerdo de diez mil millones de dólares con la empresa de transporte danesa DSV se ha retrasado por la falta de aprobaciones regulatorias, teniendo en cuenta que dicha entidad mencionada sigue esperando que Arabia Saudí y Egipto den luz verde al desarrollo del transporte en la megaciudad.
No obstante, una persona asociada con el Gobierno habló con BBC y le dijo al medio que estas aprobaciones «se basan en múltiples factores«, añadiendo que «no hay duda de que habrá una recalibración». Asimismo, personas familiarizadas con el proyecto apuntan al mismo diario que «los desarrolladores se centran en completar 2,7 kilómetros de la ciudad lineal para 2030».
Un coste muy elevado
El Fondo de Inversión Pública (PIF, por sus siglas en inglés) se encarga de financiar la megaciudad de Arabia Saudí. En un principio, el coste oficial para construir Neom eran 500.000 millones de dólares, pero los analistas consideran que la construcción completa cuesta más de dos billones de dólares.
Al final, el elevado coste del proyecto provoca que los arquitectos e ingenieros tengan que reducir las previsiones y revaluar la propuesta. Además, el recorte en el número de habitantes y kilómetros supone un frenazo en la construcción de las infraestructuras necesarias.
Cómo será la ciudad The Line de Arabia Suadí
El príncipe heredero del país, Mohammed bin Salman, aseguró cuando presentó el proyecto que The Line iba a «revolucionar nuestra civilización». Él hablaba que la super ciudad tendría dos bloques paralelos, de 488 metros de altura cada uno, que, supuestamente, se extenderán en una línea recta a lo largo de 2,4 kilómetros.
No obstante, se espera que esta ciudad lineal disponga de alrededor de 9 millones de habitaciones y que sus habitantes se muevan a través de un tren de super alta velocidad.
Además, como hemos mencionado anteriormente, The Wall Street Journal explica que el fondo soberano de Arabia Saudí «ha caído cerca de un 75%» y que ronda los 15.000 millones de dólares, que es la cifra más baja desde diciembre de 2020. Eso puede que ralentice el proyecto Neom, que tienen el objetivo de que concluya en 2045.
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