Un cohete Falcon 9 de la empresa aeroespacial SpaceX lanzó el pasado 16 de agosto cuatro satélites de la compañía española Sateliot para desplegar la primera constelación de satélites de órbita baja con estándar 5G para IoT (Internet de las cosas, por sus siglas en inglés) y con cobertura en todo el planeta.
En una nota de prensa enviada a los medios de comunicación, Sateliot afirmó que el cohete alcanzó la órbita programada situada en torno a 550 kilómetros de altura, además, un secuenciador activó la eyección de los satélites al espacio para cumplir con el plan técnico previsto.
Después, una vez en el espacio, empezó a llegar el suministro eléctrico a los subsistemas principales de los satélites y los sistemas de control de actitud iniciaron el proceso de estabilización y redirección de los paneles hacia el sol, de esta manera, unas horas después del lanzamiento, los satélites se comunicaron por primera vez con la Tierra.
Pero, ¿qué supone esta misión para Sateliot? La compañía explica en una nota de prensa que «estas primeras comunicaciones se utilizarán para conocer la telemetría de los satélites y para verificar su correcto estado tras las condiciones extremas del lanzamiento. Además, en las próximas semanas se verificarán todos los sistemas de los satélites para asegurar que todo funciona correctamente y que el payload pueda empezar a cumplir los objetivos de la misión con los mensajes 5G IoT».
Por otro lado, ante tal hito espacial, Jaume Sanpera, consejero delegado de Sateliot, afirma que «este lanzamiento supone un paso histórico para la compañía y para España. Para nosotros, porque con estos cuatro satélites comenzaremos a materializar en servicios los contratos que tenemos ya cerrados con X clientes en todo el mundo. Y para nuestro país, porque se trata de un proyecto país que lo coloca en la vanguardia de la conectividad IoT a nivel mundial«.
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