El sábado, Antofagasta de la Sierra fue escenario de una celebración cargada de cultura, tradiciones y una energía única que cautivó tanto a locales como turistas.
La jornada estuvo marcada por una gran diversidad de actividades que celebraron la riqueza cultural y natural de la región puneña. Ganaderos, artesanos y visitantes se unieron para disfrutar de una experiencia única que no solo destacó el trabajo y las costumbres locales, sino que también sirvió de importante atractivo turístico, invitando a conocer más de esta pintoresca zona.
Uno de los momentos más significativos y emotivos del evento fue la realización de la Corpachada, un ritual andino tradicional que honra a la Pachamama. Este acto, que se lleva a cabo principalmente el 1° de agosto para marcar el inicio de la temporada de lluvias, consiste en ofrecer alimentos, bebidas y hierbas a la Tierra, como muestra de agradecimiento por los frutos que brinda y como pedido para que continúen llegando.
El evento, que reflejó el profundo vínculo entre la comunidad y sus raíces ancestrales, también ofreció a todos los presentes una experiencia visual que dejó postales inolvidables de la Puna. Sin duda, la feria se consolidó como una cita ineludible para quienes buscan adentrarse en las tradiciones más auténticas del norte argentino.
