El temporal del martes de la semana pasada generó múltiples inconvenientes en el
sistema de energía del Valle Central. La caída de árboles, postes y de cableado
del tendido generó que cientos de usuarios permanezcan varias horas sin
servicio.
Aldo Palavecino, vocero de la Ec Sapem, explicó en detalle sobre los trabajos que
se ejecutaron, el tiempo y las condiciones que requieren los mismos y el recurso
humano que lo llevó a cabo.
En dialogo con El Esquiú.com, Palavecino señaló que: “Lo primero que hay que
saber es que el sistema eléctrico provincial es un todo organizado para proveer
energía a los 150 mil usuarios que tiene actualmente EC SAPEM. Cuando
suceden temporales tan importantes como el del martes pasado, con tanto poder
destructivo, distintas partes de ese todo que es el sistema resultan dañadas. Los
trabajos de reparación es una cuestión compleja. Se trata de revisar todas las
partes del sistema, una por una, reemplazar todas las partes que ya no puedan
cumplir la función específica para la que se diseñaron; columnas, cables, fusibles,
transformadores, todo”.
En idéntico sentido, comentó que: “La construcción del sistema eléctrico, es un
trabajo técnico especializado, muy meticuloso, y su puesta en funcionamiento lleva
mucho tiempo. En la emergencia, tras el feroz temporal del martes, nuestros
operarios reconstruyeron todo en 48 horas. Es una tarea muy importante, porque
implica trabajos que deben hacerse con gran responsabilidad por las
consecuencias que puede acarrear un error; en condiciones muy difíciles y con la
carga extra de que todo debe hacerse en el menor tiempo posible para restablecer
el servicio eléctrico en forma urgente”.
El operativo
“Todo el trabajo comenzó a las 23.00 del martes 17 de enero. El directorio
completo en la empresa, con el presidente Jeremías Prieto a la cabeza, junto a
todo el plantel de técnicos especializados, todos diagramaron desde los primeros
relevamientos y las primeras tareas de la reconstrucción”, explicó Palavecino
sobre el inicio del plan de trabajo.
Seguidamente, “Realizados los relevamientos de daños, de las partes dañadas
del sistema eléctrico, las tareas son muchas; el protocolo a seguir indica que debe
avanzarse de lo general a lo particular. Al final quedaran por hacerse trabajos en
domicilios particulares y el retiro del material de las calles. Las distintas etapas de
reconstrucción del sistema van desde las líneas de alta tensión, pasa a las líneas
de media tensión y llega a las líneas de baja tensión. La última etapa es de
atención en las acometidas domiciliarias, que también son dañadas en temporales
como el que se vivió. Todo ese trabajo es enorme, que debe hacerse con mucha
responsabilidad, en condiciones sumamente difíciles, en la oscuridad, en la lluvia,
en altura, y en el menor tiempo posible”, manifestó el vocero de la empresa
distribuidora de energía.
En cuanto a las cuadrillas que se desplegaron para trabajar y restablecer el
servicio, el vocero de la empresa distribuidora explicó que: “A las 0 horas del
martes 18 de enero, el presidente Jeremías Prieto y el vice Héctor Boscolo, habían
dispuesto que todas las cuadrillas de operarios estuvieran trabajando en la
reconstrucción del sistema eléctrico. En total fueron 30 cuadrillas (cada una
integrada por tres personas con una importante formación técnica y una
experiencia no menor a los 10 años de trabajo en la calle y en altura). A ellos se
sumaron 10 grúas, operadas por personal especializado”.
En idéntico sentido, comentó que: “100 personas, que trabajando 15 horas por
jornada, que es lo máximo que se les exige por seguridad laboral, en 48 horas
reconstruyeron todo el sistema eléctrico destruido por el temporal que tuvo ráfagas
superiores a los 100 KM/h”.
“En 3000 horas de trabajo hombre, se reconstruyo un sistema que llevo años
construir, que el temporal destruyo en 30 minutos. Por supuesto que para esa
enorme tarea se contó con el apoyo de trabajadores del Ministerio de Agua,
Energía y Medio Ambiente; así lo había dispuesto el ministro Lucas Zampieri”,
detalló Palavecino.
Por último, el responsable de relaciones institucionales de la empresa comentó a
este diario que: “Los días viernes y sábado pasado, cuando el sistema funcionaba
a pleno, y cuando el 95% de los usuarios ya contaban con servicio eléctrico,
nuestra gente siguió con la atención de los casos particulares. Las acometidas o
bajadas domiciliarias son destruidas por árboles que caen en las veredas. Eso se
estuvo recomponiendo los últimos días. También se avanzó en el retiro del material
en las calles, pero en esa cuestión queda mucho por hacer. Lo primero siempre es
restablecer el servicio a la mayor cantidad de usuarios posible; luego los casos
particulares, y para el final el emprolijamiento de los trabajos hechos en la
emergencia”.