El lunes por la noche, personal policial debió intervenir en un violento episodio de violencia familiar, en el que una mujer resultó con heridas y sus hijos fueron arrojados del vehículo antes de que su pareja, un remisero, se diera a la fuga para no responder ante la policía.
Fuentes judiciales dieron a conocer que el hecho habría ocurrido sobre una avenida de la zona norte de la ciudad, cuando un ocasional transeúnte observó que dentro del automóvil, un remís, una joven estaba siendo golpeada.
El vecino llamó a la policía, por lo que se hicieron presentes en el lugar efectivos de la comisaría Octava, quienes al arribar habrían observado cómo el sujeto golpeaba duramente a la mujer en la calle, ya que el ataque continuaba en la calle en un presunto intento de la víctima por escapar.
Al observar la cercanía de los uniformados, el hombre habría ingresado nuevamente al automóvil para darse a la fuga, y en ese momento la joven, entre lágrimas, contó que sus hijos menores de edad iban a bordo del auto y el hombre se los estaba llevando.
Grande fue la sorpresa de los presentes cuando el automovilista detuvo su marcha a los pocos metros y arrojó a los pequeños del vehículo para proseguir con la huida a toda velocidad.
Las fuentes dieron a conocer que con los datos aportados por la presunta víctima el remisero ya estaría identificado.
Desde la fiscalía de Instrucción en turno se emitió una orden de arresto para que responda por violencia de género y también hacia sus hijos menores de edad.
