Las comunicaciones inalámbricas seguirán siendo uno de los principales objetivos de las ciberamenazas durante 2020, tanto en redes Wi-fi como conexiones Bluetooth, dada la utilización permanente y extensiva de estos dispositivos.
Se trata de una de las principales conclusiones del ‘Informe Anual 2019. Dispositivos y comunicaciones móviles’, elaborado por la Capacidad de Respuesta a Incidentes del Centro Criptológico Nacional, CCN-CERT, adscrito al Centro Nacional de Inteligencia (CNI), hecho público este jueves.
Respecto a los futuros avances y usos de los dispositivos móviles, el documento recoge que Google está analizando la posibilidad de emplear el móvil como identificador electrónico para diferentes apps, «de manera similar al carnet de conducir».
Asimismo, plantea la complejidad y el desconocimiento de las tecnologías integradas en los dispositivos móviles, especialmente las asociadas a las comunicaciones, la tarjeta SIM y los componentes de radio, que coexisten con el sistema operativo y chips principales en Android e iOS, y para los que no se dispone de «mecanismos avanzados y eficientes de monitorización y protección».
Entre las incógnitas para 2020, apunta a la incertidumbre sobre las posibles implicaciones de seguridad que aparecerán si finalmente Huawei desarrolla un nuevo sistema operativo diferente de Android.
Creación de código dañino, una de las grandes amenazas de 2019
Además de las ciberamenazas a las comunicaciones inalámbricas, que han sido una constante en 2019 y continuarán en 2020, el documento destaca la creación de código dañino para dispositivos móviles -o malware- como uno de los grandes problemas del año pasado. De hecho, identifica numerosos especímenes cada vez más complejos y sofisticados con campañas específicas para Android e iOS.
Otras de las grandes amenazas del año pasado, expuestas en el informe, son las vinculadas con el desbloqueo y explotación de dispositivos móviles y la extracción forense de datos.
