La Provincia avanza en su afán de poder recibir el resarcimiento correspondiente por la obra del estadio Bicentenario, el cual a los pocos años de haber sido inaugurado por el exgobernador Eduardo Brizuela del Moral comenzó a mostrar fallas edilicias y posteriormente dejó de ser utilizado por el daño estructural que sufrió en algunos sectores.
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El proceso empezó y en el mes de abril se declaró abierto el pequeño concurso preventivo de quiebra de Capdevilla Empresa Constructora SA, la cual estaba encargada de la obra, presentándose entidades gremiales, bancos, particulares, la municipalidad de la Capital y el Estado Provincial a través de la Fiscalía de Estado.
En tal sentido, el fiscal de Estado Carlos Bertorello confirmó que la Provincia participará de esta instancia judicial, explicando que «hay dos alternativas: o continuamos el proceso ordinario, es decir el cobro de los daños y perjuicios, o nos presentamos como acreedores pidiendo la verificación”.
Asimismo, el funcionario provincial aclaró que estando en el concurso «podemos controlar el proceso concursal” y «en el caso de que no llegue a un acuerdo favorable para los intereses de la provincia”, podrán plantear todas las cuestiones que lleven a la liquidación de la empresa.
En cuanto al proceso del concurso, agregó que durante 10 días, a partir del día 26, tanto «el concursado como cualquiera de los presentados pueden, respectivamente, impugnar las presentaciones”, es decir, por ejemplo, la Fiscalía de Estado puede impugnar las presentaciones que hicieron otros acreedores o el deudor impugnar las presentaciones que hicieron los acreedores por diversos motivos.
Por otra parte, Bertorello, en referencia al monto que reclaman a la empresa en cuestión, sostuvo que «primero no sabemos cuándo se podrá rever, porque el reclamo tiene que ser pagado por la empresa y segundo, los daños que también están apareciendo en la estructura nos llevan a sostener que se debía reclamar el total, prácticamente 257 millones de pesos, que es el costo ajustado a la fecha, ajustado por los técnicos de Obras Públicas”.
Además, expresó que si la empresa no puede pagar el dinero que se le reclama, se puede dar la quiebra, explicando que «hay que liquidar los bienes” y determinar si hay motivos para reclamarles a los propietarios o los directivos de la empresa que respondan con bienes propios o de otras empresas que tengan.
Finalmente, Bertorello, en diálogo con «Cae el Telón”, manifestó: «Lo único que puedo decirles es que estamos tratando de obtener un resarcimiento para que la Provincia encare la obra (…). Lo que sí le digo es que el daño que se le ha hecho al Estado, no voy a decir que es irreparable, pero es un perjuicio enorme”.