En la jornada de hoy sería presentada en el juzgado de Primera Instancia en lo Civil N°5 una demanda por $158.610.000, por la expropiación de 38 hectáreas donde actualmente está emplazado el barrio La Esperanza, en el norte de la Ciudad.
En diálogo con El Ancasti, Pedro Norberto Calabria, apoderado del titular de esas tierras, manifestó que la Municipalidad de la Capital «no resarció de manera integral a los dueños de los terrenos que expropió, donde previamente permitió la usurpación y el asentamiento de familias enteras, a pesar de la judicialización iniciada tras el comienzo del conflicto hace ya varios años, en lo que es hoy barrio La Esperanza. Por eso, pedimos a la Justicia que ordene a la Municipalidad que pague en concepto de indemnización poco más de $158 millones, a quien figura actualmente como titular de esas tierras».
Por su parte, Pablo Nieto, responsable de la presentación legal, explicó que el conflicto con la Municipalidad se agudizó porque gran parte de las más de 600 familias que ahora viven en ese loteo «quieren escriturar, pero se dan con que las tierras están a nombre de Ricardo Moreyra, el dueño, y que el juicio de expropiación iniciado por la comuna en 2009 y continuado en 2013, nunca terminó».
En caso de que la Justicia haga lugar al pedido de indemnización, deberá tener en cuenta que al momento de decidir la expropiación por parte del Concejo Deliberante esas tierras ya «contaban con un proyecto urbanístico que preveía la instalación de locales comerciales y espacios verdes, que estaba en conocimiento de la entonces administradora de Catastro municipal, Vilma Acosta Ortega, que nunca lo autorizó, y el administrador del IPV, Pedro Molas, quien luego consintió la edificación de viviendas», mientras que la urbanización del barrio se inició en este gobierno y estuvo a cargo de la Secretaría de la Vivienda.
Por otra parte, Calabria y Nieto aseguraron que se trata de «unas 700 viviendas que no podrán tener escritura», a pesar de que hay familias que llevan más de 15 años viviendo en lo que en definitiva es un asentamiento que aún se encuentra en trámite de urbanización.
Finalmente manifestaron que «esta forma de expropiar y nunca terminar con los juicios parece ser un modus operandi de la Municipalidad, porque hay muchísimos casos en los que expropiaron y los ocupantes de los terrenos nunca pudieron juntarse con las escrituras de los lotes».
Cabe recordar que actualmente hay un conflicto entre vecinos y la comuna por la posible expropiación de tierras en el barrio Magisterio, también ubicado en el norte de la Ciudad. En este caso, los usurpadores de los terrenos exigieron a la Municipalidad una solución a la falta de ordenamiento del barrio, por lo que el Concejo Deliberante comenzó recientemente a discutir un proyecto para expropiar las tierras, a pesar de la diferencia de criterios entre el FpV, el Frente Cívico y el Frente Tercera Posición.