Un individuo que se encontraba alojado en el calabozo de una comisaría fue víctima de abuso sexual por parte de otros sujetos con los cuales compartía la celda. Por el hecho la fiscalía a cargo de la pesquisa ya realizó imputaciones y hoy se realizarán indagatorias El grave caso sucedió el miércoles pasado y si bien se manejó con total hermetismo, se conoció que todos sucedió en el calabozo de la comisaría Quinta, ubicada en Obispo Esquiú y avenida Colón, en el barrio Villa Cubas.
El fiscal de instrucción Nº5, Hugo Costilla, quien se encontraba de turno el día del hecho, ordenó medidas inmediatas que llevaron a imputar a cuatro personas.
Según se conoció la denuncia se realizó el jueves por el damnificado y en el marco de la pesquisa y como primera medida Costilla ordenó realizar el protocolo de abuso, procedimiento que confirmó la existencia del ultraje.
En ese contexto se ordenó a personal de la Unidad Judicial Nº5 el secuestro de libros de guardia de la comisaría para determinar los horarios de ingresos y egresos de las personas que se encontraban alojados en la dependencia. También dictaminó tomar testimonios al personal policial que se encontraba en la guardia al momento de ocurrido el hecho.
En paralelo pidió una pericia psicológica a la víctima y en base a ese informe y al análisis de todos los elementos de pruebas reunidos Costilla avanzó en las imputaciones.
Imputó el delito de «abuso sexual con acceso carnal agravado por el número de personas» y según se conoció las indagatorias se realizarán en el transcurso de la jornada de hoy.
Por el hecho, El Ancasti dialogó con el jefe de Policía, comisario general Orlando Quevedo, quien señaló que tomó conocimiento del hecho a través de un informe elevado a su despacho por el oficial a cargo de la comisaría.
«El oficial de servicio realizó un informe en el que nos informaba que un preso le había puesto en conocimiento que había sido víctima de abuso sexual por parte de otros presos en la celda», explicó Quevedo.
En tanto señaló que el oficial le informó que el damnificado no quería realizar la denuncia.
«Como se trata de un delito de instancia privada lo que hicimos es ponerle en conocimiento al fiscal porque el hecho ocurrió en la dependencia policial. Desde la Justicia señalaron que el hombre debía realizar la denuncia para iniciar la investigación», explicó Quevedo.
La denuncia finalmente se realizó días después y en la misma la víctima identificó a los autores, teniendo en cuenta que ingresan y egresan constantemente personas privadas de su libertad.
