Esta semana el juicio oral por el caso Luz Villafañe ingresará en la recta final, ya que está previsto que se expongan los alegatos y que posteriormente se dé a conocer el veredicto. También está previsto que el único imputado preste declaración en el debate.
El juicio oral comenzó el pasado miércoles en la sala de audiencias de la Cámara de Sentencia Penal Juvenil, de calle Chacabuco.
En el primer día se realizó la lectura del requerimiento de citación a juicio, en el que se da un relato pormenorizado del hecho que se juzga y el delito que se le endilga al sospechoso. Hasta esa etapa estuvo la prensa presente pero posteriormente se invitó a los periodistas a retirarse del recinto y el debate siguió a puertas cerradas. Ese día, el acusado se abstuvo de prestar declaración.
Posteriormente se escucharon a siete testigos. El testimonio clave de ese día fue el de Jacqueline Quevedo, la madre de la víctima, quien dio su versión de los hechos y dio su testimonio entre lágrima. Ese día se presentaron familiares, conocidos y amigos de la adolescente. Algunos coincidieron en señalar que la joven estaba bajo los efectos de las drogas y que si bien se fue voluntariamente de la fiesta con el acusado, no se encontraba en condiciones de dar su consentimiento. La audiencia se extendió hasta pasadas las 14.
Al término de la primera jornada la madre del acusado señaló en declaraciones a la prensa que la menor de edad presentaba signos de un abuso sexual cometido 72 horas antes de la fiesta.
«Está todo dicho; hay una violación de vieja data. Que no quede impune; que salga el verdadero violador. Justicia por Luz, es lo único que pido; que salgan los verdaderos violadores», dijo.
Los once testigos que se presentaron el pasado jueves hablaron de una fiesta de adolescentes en las que abundaban las bebidas alcohólicas y las pastillas.
Los testimonios mencionaron que al menos 35 personas estaban en la fiesta. La mayoría eran adolescentes.
En la tercera audiencia, el testimonio más destacado fue el del médico forense que realizó la autopsia y mencionó que las lesiones que se detectaron en el cuerpo de Luz eran compatibles con las de una relación sexual no consentida.
El médico Sergio Andrada había declarado en la etapa de investigación que las lesiones se correspondían con un abuso sexual, pero que no descartaba que las secuelas hayan sido producidas por una relación sexual consentida.
Sin embargo, en el juicio, Andrada dijo que esas lesiones son por un abuso sexual exclusivamente. El fiscal Guillermo Narváez advirtió esa contradicción y el médico pidió disculpas.
Luego de agotar la lista de testigos el Tribunal compuesto por los jueces Rodrigo Morabito, Mauricio Navarro Foressi y Luis Guillamondegui resolvió pasar a un cuarto intermedio hasta el miércoles. En la audiencia del viernes pasado, el Defensor Oficial, Sergio Veliz, manifestó que era intención de su pupilo prestar declaración, por lo que esto ocurrirá el miércoles. Luego habrá alegatos y posiblemente el veredicto.
La causa tiene como un imputado a un joven que al momento del hecho era un adolescente de 16 años. Oportunamente, fue imputado por el delito de “abuso sexual con acceso carnal”.
