CONSIDERA QUE HAY «RIESGO PROCESAL»
La Fiscalía de la Sexta Circunscripción Judicial imputó al sacerdote por tres hechos de abuso sexual en la infancia. En la Capital, se tramita otra denuncia.
A horas de la indagatoria al cura Eduardo Raúl López Márquez, recientemente imputado por tres hechos de abuso sexual en la infancia (ASI), la querella particular solicita su inmediata detención. El sacerdote fue denunciado a finales de 2021, en La Paz, por ultrajes cometidos en 2002. Sin embargo, a los casi 20 años de su silencio hasta que pudiera manifestar los abusos y realizar la denuncia penal correspondiente, se sumaron los planteos y recursos procesales.
A finales de la semana pasada, la fiscal de la Sexta Circunscripción Judicial, con asiento en Recreo, La Paz, Virginia Duarte Acosta imputó a López Márquez por un hecho de «abuso sexual gravemente ultrajante calificado por la situación de guarda y por ser cometido por un ministro de culto en calidad de autor» y, «corrupción de menores agravada por la guarda de la víctima, en calidad de autor, en concurso ideal». Por un segundo hecho fue imputado por «abuso sexual con acceso carnal, calificado por la situación de guarda y por ser cometido por un ministro de culto, en calidad de autor» y «corrupción de menores agravada por la edad de la víctima, en calidad de autor». El tercer hecho que se le endilga es de «abuso sexual con acceso carnal, calificado por la situación de guarda y por ser cometido por un ministro de culto, en calidad de autor» y «corrupción de menores en calidad de autor, en concurso ideal». La fiscal remarcó además que se trata de «tres hechos en concurso real».
A estos hechos, al cura se le sumó una segunda denuncia por delitos contra la integridad sexual. Tales ultrajes habrían sucedido en Capayán y fueron denunciados en la Fiscalía.
Sobre los hechos denunciados en La Paz, la querella –representada por el abogado del foro local Sebastián Ibáñez- solicita la inmediata detención del sacerdote López Márquez, debido al existente riesgo procesal, por la gravedad de los delitos denunciados y el inicio de otra investigación penal en su contra, por iguales delitos. Además, solicita “la confirmación de dicha medida coercitiva”. Para la querella, “es harto evidente” que el imputado se enfrente ante delitos con “la imposibilidad de una futura condena condicional. Existen además vehementes, concretos y objetivos indicios de posible fuga o entorpecimiento de la investigación. El encartado López Márquez, además de contar con amplios recursos (económicos y logísticos, entre otros) para profugarse, enfrenta otra investigación en su contra”.
Pecado y delito
“Solamente pido Justicia”, expresó el denunciante. El hecho habría sucedido entre 2002 y 2003 y la víctima habría sido un chico de 12 años. Durante casi 20 años guardó silencio, hasta que a finales de 2021, decidió denunciar. En un primer momento, la Fiscalía de Recreo desestimó la denuncia y ordenó el archivo, al considerar que el hecho estaba prescripto. Sin embargo, la querella se opuso y la jueza de Control de Garantías, Corina Pérez resolvió que la causa no estaba prescripta.
En septiembre del año pasado, la Cámara de Apelaciones en lo Penal y de Exhortos, integrada por los jueces Elena Berrondo Isí, Mauricio Navarro Foressi y Fernando Esteban resolvió no hacer lugar a la defensa de López Márquez, que había planteado la prescripción.
Con relación a la segunda denuncia, asentada en la Capital, el abogado de la querella indicó que el modus operandi de López Márquez fue el mismo en los tres casos: “A los chicos los llevaba a las casas parroquiales, junto con ese otro sacerdote Batallán, que falleció y estaba en la denuncia de la primera víctima: ahí los alcoholizaban con vino y los sometían. Es el primer sacerdote que tiene dos víctimas con denuncias sucesivas”, declaró el abogado.
Curas acusados
Eduardo López Márquez
Registra dos denuncias, por ultrajes cometidos en 2002, en Capayán y La Paz.
Juan de Dios Gutiérrez
Denunciado en Belén en octubre de 2015, en abril de 2021 fue condenado a 12 años de prisión.
Renato Rasgido
Fue denunciado en 2014, en Andalgalá. En breve, ocuparía el banquillo de la Cámara Penal Nº 2.
Moisés Pachado
Fue denunciado a finales de 2018, en Belén. Falleció en junio del año pasado.
Cura penado regresa adonde abusó
La Justicia bonaerense autorizó al cura Manuel Pascual, condenado en diciembre pasado a 12 años de prisión por abuso sexual de monjas, a vivir en un campo de la localidad de Capitán Sarmiento donde él realizaba retiros espirituales y según la sentencia, cometió algunos de los hechos. Pascual, quien está en libertad y a la espera de que el fallo quede firme para quedar detenido, pidió la autorización al Tribunal Oral Criminal 3 porque dijo que atravesaba un período de depresión por la difusión mediática de su caso.
Así el cura podrá vivir en «La Ermita», el campo de su propiedad ubicado en la provincia de Buenos Aires y donde según la Justicia se cometieron algunos de los hechos cuando él les pedía acompañarlo en esa suerte de retiros espirituales que realizaba. Los abusos fueron entre 2012 y 2016 y tuvo como víctimas a dos religiosas de la congregación Hermanas de San José, en el barrio porteño de Núñez.
Fuente: El Chasqui Digital
