El sacudón económico que dejó el dólar volvió a poner en tela de juicio la inflación y abrió otra incógnita en torno a la pauta oficial para las negociaciones salariales y justamente el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, fue quien admitió que «seguramente» se activarán las cláusulas de revisión de los acuerdos paritarios en función de las expectativas de inflación.
«Una realidad son las paritarias que van de abril a abril, que dejan afuera la inflación del primer trimestre, y otra historia son las que van de enero a enero. Las cláusulas de revisión dan más certeza», dijo el funcionario.
En otras palabras, con esta definición, Triaca reconoció que difícilmente se cumpla la meta inflacionaria del 15% que trazó el Gobierno y que él buscó replicar como pauta salarial de referencia.
El ministro señaló en una nota publicada por La Nación que ya se cerró el 70% de las paritarias de este año, lo que marca la «vocación negociadora de las partes» y que las cláusulas se incorporan porque es de interés «preservar el poder adquisitivo como motor del crecimiento».
Hasta el momento veinticuatro actividades cerraron en un aumento en promedio del 15% o menos, la mayoría en dos cuotas, entre ellos Obras Sanitarias, UOCRA, Luz y Fuerza, Unión Ferroviaria, aceiteros, porteros y petroleros.
En la nómina de acuerdos aparecen UPCN, metalúrgicos, Camioneros, Aerocomerciales, Salud y Alimentación como las próximas más relevantes en términos de tamaño y posible conflictividad.
Triaca MacriEntre los que ya comenzaron a alzar la voz está el gremio de Hugo Moyano, que ya anunció que reclamará una suba del 23%.
Por otra parte, el funcionario intentó justificar las diferencias en los aumentos entre un sector y otro: «Cada una dirá qué es lo que puede pagar y los gremios qué necesitan. Hay sectores a los que les va mejor. Las negociaciones son libres y la cláusula da más certidumbre por eso se incluye, pero es importante analizar el período que abarcan las paritarias porque habrá diferencias», dijo.
Triaca compartió un almuerzo con los empresarios en la Bolsa de Comercio de Córdoba. Allí descartó que en las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) pueda haber exigencias en torno de una mayor flexibilización laboral. «El eje de las conversaciones está en las cuentas públicas, pero eso no significa que no queramos que haya un gran debate sobre cómo resolver el estancamiento del empleo privado, la agremiación, la formalización. No son debates solo legislativos, sino que los tiene que dar la sociedad».