Después de más de tres décadas del estreno de la secuela de Terminator, unos investigadores de la Universidad China de Hong Kong han conseguido recrear a su manera algo que se mostraba en la película. Se trata de un robot pequeño que es capaz de pasar de forma sólida a líquida y viceversa, como T-1000 podía hacer en la trama.
El proyecto, publicado en Matter, narra cómo el equipo liderado por el científico Chengfeng Pan logró que el robot cambiase de forma gracias a que son magnéticos y pueden conducir electricidad. Para probar su efectividad, el invento se sometió a una carrera de obstáculos y a experimentos de transformación.
Los robots a los que estamos acostumbrados se caracterizan por tener un cuerpo duro y rígido, pero ya existen robots flexibles. Estos tienen una desventaja: son débiles y es complicado que controlen sus movimientos. Con su estudio, el equipo de la Universidad China de Hong Kong ha conseguido solventar este problema.
«Dar a los robots la capacidad de cambiar entre estado líquido y sólido les otorga más funcionalidad –detalla Chengfeng Pan-. En su construcción utilizamos partículas magnéticas en galio, un metal con un punto de fusión muy bajo (29,8 ºC)«. El investigador explica que las partículas magnéticas en este caso tienen dos funciones: «Una es que hacen que el material responda a un campo magnético, por lo que puede, a través de la inducción, calentar el material y provocar el cambio de fase, de sólido a líquido […]. Las partículas magnéticas también dan movilidad a los robots y la capacidad de moverse en respuesta al campo magnético».
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Los científicos comentan que los materiales de cambio de fase que existen actualmente dependen de pistolas de calor, corrientes eléctricas u otras fuentes de calor externas. No obstante, el nuevo material permite inducir la transformación de sólido a líquido de manera «extremadamente fluida» y no viscosa.
Chengfeng Pan y su equipo tuvo que estudiar la movilidad y resistencia del material sometiéndolo a experimentos. Los robots tuvieron que saltar fosos, escapar paredes y dividirse para sortear obstáculos y volverse a unir.
Según los investigadores, el robot estilo Terminator 2 podría aplicarse para soluciones médicas o para reparar maquinaria compleja. En una demostración de sus posibles usos, los científicos enseñan como su peculiar versión de T-1000 podría emplearse para rodear un objeto extraño en el estómago y extraerlo.
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