Tiene 15 años y como su madre no tenía para darle de comer a él y a sus hermanos menores, tomó unas pertenencias que su padre M.H.V. -la identidad se reserva para resguardar al adolescente- había dejado en la vivienda que ya no habita y las vendió.
El hombre se enteró. Fue a la casa y golpeó a su hijo. Además, le arrojó sus prendas de vestir a la calle y lo echó de la casa recriminándole por qué le había vendido sus pertenencias para comer.
Voceros judiciales comentaron a este diario que se tomó conocimiento de la difícil situación familiar el martes, pasadas las 13.30, cuando la madre del jovencito agredido y expareja del padre de este se presentó ante los sumariantes de la Unidad Judicial Nº 9 y denunció a su expareja. Según se desprende del informe judicial, la familia en cuestión atraviesa una situación económica muy difícil, lo que llevó al hijo mayor a vender una reja y dos chapas, elementos que eran de su padre y estaban en desuso en la casa. Con el dinero que recibió por la venta, el jovencito compró mercadería para que sus hermanos pudieran comer.
Al enterarse el padre que su hijo había vendido las pertenencias mencionadas, fue a la casa en la que ya no habita y golpeó físicamente a su hijo para luego echarlo a la calle con sus pertenencias.
Luego de que su padre lo corriera, el adolescente se comunicó con su madre, quien no estaba en la vivienda al momento del hecho y le relató lo que había ocurrido, por lo que la mujer regresó de inmediato al hogar y acompañada por su hijo, realizaron la denuncia en contra del padre.
El jovencito le contó a la mujer también que, antes de cerrarle la puerta y dejarlo en la calle, el hombre le dijo al chico que a la noche regresaría a la vivienda y la correría también a la madre y a sus hermanos.
Conocida la denuncia, el fiscal en turno dispuso que el adolescente sea examinado por el médico legista para constatar el grado de lesión padecido.