La NASA estaba buscando, hace unos meses, un vehículo de desorbitación «seguro, confiable y rentable» para ‘destruir’ la Estación Espacial Internacional (ISS, por sus siglas en inglés) a partir de 2030. El contrato de esta agencia espacial requería que el contratista elegido diseñara, fabricara y probara un ‘Vehículo de Desorbitación estadounidense’ (USDV, por sus siglas en inglés) para llevar a cabo la desorbitación final de la ISS; y, finalmente, el gobierno de Estados Unidos anunció que SpaceX es el candidato elegido por la NASA.
La empresa aeroespacial de Elon Musk recibió la encomienda de diseñar una nave de desorbitación y, en julio de este año, dio a conocer las primeras imágenes de dicho vehículo remolcador.
Ahora, con el objetivo de ir preparando el retiro oficial de la ISS, SpaceX utilizará su nave Dragon para impulsar la Estación Espacial Internacional, además, encenderá sus motores durante trece minutos para empujar ligeramente dicho laboratorio orbital a lo largo de este viernes 8 de noviembre.
Este impulso será una novedad para la nave Dragon, ya que nunca se había utilizado para este tipo de maniobra. Normalmente, se empleaba la nave rusa Soyuz para realizar la tarea de reimpulso, pero, la NASA está probando la capacidad de Dragon para empujar a la Estación Espacial Internacional fuera de su lugar mientras sigue trabajando en el desarrollo de un vehículo de desorbitación.
Así será la maniobra de la nave Dragon
Actualmente, la ISS se encuentra en una órbita baja terrestre, a unos 400 kilómetros por encima de la Tierra.
Esta maniobra de empuje tiene que llevar al laboratorio orbital a una órbita elíptica, de esta manera, quedará atrapada por la atmósfera y, de cara a un futuro, garantizará un descenso controlado.
Según el diario especializado Space.com, Jared Metter, director de confiabilidad de vuelo en SpaceX, afirmó en una teleconferencia que los datos que van a recopilar de esta demostración de reimpulso y control de actitud serán «muy útiles»: «Estos datos conducirán a capacidades futuras, principalmente al vehículo de desorbitación estadounidense».
Cómo será la nave que ‘destruya’ a la ISS
La ISS se retirará en 2030, por consiguiente, la NASA está elaborando un plan para desorbitar este laboratorio orbital y enviarlo a través de la atmósfera terrestre, donde la mayor parte de su interior se quemará por el calor del reingreso.
El encargado de ‘destruir’ la Estación Espacial Internacional será muy similar a la cápsula Dragon, además, dicha nave estará compuesta por una cápsula Dragon 2 y un enorme módulo de servicio dotado de 30 motores Draco adicionales para despegar a bordo de un cohete Falcon Heavy.
Por otro lado, según los requisitos de la NASA, la nave debe tener un empuje superior a 3,24 kilonewtons para garantizar que el encendido final permita desorbitar a la ISS sobre el Océano Pacífico, sin embargo, este empuje no puede ser superior a los 6,2 kilonewtons porque sino la estructura de la ISS se romperá antes de desorbitarla.