EL ASESINATO DEL MINISTRO DE DESARROLLO SOCIAL
El reclamo se escuchó en el centro capitalino. Estuvieron los hijos, amigos, sindicalistas y dirigentes de la oposición.
Con una gran concurrencia se llevó a cabo ayer a la mañana la marcha al cumplirse los tres meses del crimen del ministro de Desarrollo Social, Juan Carlos Rojas. La familia se unió en un abrazo, emocionada, al culminar la manifestación en el edificio de Fiscalía Penal.
El punto de encuentro fue la Plaza 25 de Agosto. El numeroso grupo, conformado por hijos y amigos de Juan Carlos Rojas, partió desde las 10 con dirección hacia el centro de la ciudad, bajo una calurosa y agobiante jornada. El grupo marchó por la peatonal Rivadavia con bombos y redoblantes, y se abrió paso hasta llegar a la Plaza 25 de Mayo.
La primera parada fue la Corte de Justicia. Fernando Rojas tomó el megáfono y leyó un escrito. «Es mucha la presión, la gente quiere saber la verdad, Catamarca quiere saber la verdad de qué pasó con el ministro y su amigo”.
Aseguró que “no tienen nada” respecto del avance de la causa y que la semana que viene “tendrán que volver a golpear las puertas de la Fiscalía a ver qué tienen de nuevo”.
La marcha siguió hasta calle Junín al 600, al frente de la Fiscalía General, en donde Fernando volvió a tomar la palabra.
«Hace tres meses nos arrebataron a uno de los nuestros. Descansaba en su casa en el barrio Norte. Descansaba. Lo vinieron a buscar de madrugada, lo golpearon, lo apabullaron a golpes y lo dejaron tirado solo en su casa. Lo encontré dormido, calmo, con el semblante de aquellos guerreros que dieron todas las batallas, que se fueron sin deber nada. Se durmió esperando que lo encontráramos. Se durmió esperando», dijo.
«¿Quién nos cuida? ¿Quién nos defiende de las oscuridades? ¿Quién va a pelear? ¿Qué ocurrirá si los malos ganan? Esos silencios atronadores se escuchan cada vez más fuerte, esos silencios que callan dicen todo» cuestionó Rojas.
Fernando estaba junto a sus hermanos. Fue el único que habló al público. Para la Justicia es sospechoso, por eso todavía no fue aceptado como querellante en la causa que investiga el Fiscal de Instrucción N° 5, Hugo Leandro Costilla.
Iván Sarquís es el abogado de los hijos de Rojas y dijo que «la familia viene acá porque necesita explicaciones, necesita saber quién mató a su papá».
«Desgraciadamente esta investigación se ha caracterizado por tener fiscales a los que no les llega la información certera y eso ya se llevó puesto un fiscal. Yo lo veo preocupado a (Hugo) Costilla, que solicita una batería de medidas que tardan hasta 30, 60, 90 días y todavía estamos esperando un perfil genético» dijo en relación con las pruebas enviadas al Laboratorio Satélite Forense.
«Este caso a la Justicia le tiene que generar un estado de alerta y reorganizarse para que no volvamos a tener esto. Si nos pasa con Rojas, que fue diputado, ministro, secretario de un sindicato, qué nos depara para el ciudadano de a pie», concluyó Sarquís en diálogo con El Ancasti.
Presencias
En la marcha también se vio a Gladys Moro, secretaria de la CGT, y Nancy Agüero, de UDA. Además estuvieron dirigentes de Juntos por el Cambio, Rubén Manzi, Enrique Cesarini y Carlos Molina.
También participaron familiares de Anyelén Gallo Arias, la joven asesinada en octubre del año pasado.




La causa
El 4 de diciembre fue encontrado muerto en su casa el ministro de Desarrollo Social, Juan Carlos Rojas.
El 5 de diciembre, el dirigente gastronómico Luis Barrionuevo sorprendía a todos afirmando que «a Rojitas lo mataron». Ese mismo día, el fiscal Laureano Palacios ordenaba la segunda autopsia donde se corrobora que efectivamente la muerte del ministro fue un homicidio.
Posteriormente son designados como fiscales coadyuvantes Hugo Costilla y Alejandro Gober.
El 7 de diciembre arrestan a Silvina Nieva, que era la empleada doméstica del ministro de Desarrollo Social. La mujer fue imputada de “homicidio doblemente calificado por mediar relación de pareja y alevosía”.
Una semana después se realiza la audiencia de Control de Detención, donde el juez Lucas Vaccaroni ordenó la inmediata liberación de Nieva, tras detectar que no se había firmado la orden de detención.
Palacios fue desplazado de la causa y se le inició el jury por el que ya se inhibieron los fiscales Alejandro Dalla Lasta y Miguel Mauvecín.
El 10 de febrero, la Fiscalía recibió el informe de los peritos de Gendarmería Nacional con el contenido de los celulares secuestrados.
Fuente: El Chasqui Digital