“El Gobierno de la Provincia protegerá el Culto Católico Apostólico Romano”. Así reza en sus preceptos la Carta Magna local. Ello permite, en el fondo, una serie de subsidios para el culto, entre ellos, el consumo de energía. En este orden de ideas y de acuerdo a información oficial, se perdonó a la Iglesia más de $4 millones en facturas de luz.
¿Cómo y por qué? Básicamente por la ley que aprobó la Legislatura provincial a finales del año pasado por la cual se afectaron los «Bonos para el Consenso Fiscal» para extinguir la deuda existente hasta el 25 de octubre de 2018 entre EC Sapem y la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico S.A. (Cammesa).
El segundo artículo de la ley en cuestión incluye tres incisos. Uno para cancelar las deudas de organismos de la administración pública para con la empresa distribuidora de energía y otro para eximir las obligaciones pendientes de los municipios a EC Sapem.
Dentro del trío está el que establece que se cancelarán las deudas registradas al 31 de octubre en concepto de consumos “subsidiados a la Iglesia Católica, Bodegueros y Regantes, Centros de Jubilados y Pensionados y electrodependientes”. En otras palabras, se perdonó del pago de la luz al último día de octubre pasado a estos cuatro grupos citados.
Ahora bien y, de acuerdo a los datos oficiales que manejan en el ministerio de Servicios Públicos, la Iglesia fue la mayor beneficiada. De hecho, si se suman los montos cancelados para los cuatro grupos, la Iglesia representa un 52 por ciento del total.
En números: la condonación de deuda para el Culto por el consumo de luz es de $4.285.959. A esta le sigue el sector productivo conformado por los Bodegueros y Regantes con una cancelación de 3.565.189 pesos.
El caso del par de grupos restantes, es decir los usuarios electrodependientes y los Centros de Jubilados y Pensionados, la cifra es mucho menor. 208.904 pesos corresponden al primero de los sectores citados y $259.676 para los segundos.
De esta forma, el reparto de la torta que surge de la suma total queda compuesto en más de la mitad para la Iglesia y un 43 por ciento para la cancelación de deuda de los Regantes. En tanto, un tres por ciento es de los centros de jubilados y pensionados y finalmente un dos por ciento para los electrodependientes.
Existe un dato llamativo dentro de la nómina a la que accedió este medio y que detalla los saldos para los períodos de pagos. Hubo meses en los que el monto de la Iglesia por consumo energético casi duplica el total general que se canceló para los electrodependientes.
De forma ilustrativa y tomando como parámetro inicio, mediados y casi finales del 2018, la Iglesia registró un consumo energético por $330.859 (en enero), 389.249 pesos (para lo que fue julio) y $499.080 (en septiembre último). Dicho de otra forma: solo en tres meses alcanzó $1.219.188 mientras que el saldo que se canceló en total para con los electrodependientes fue de $208.904.