La Gobernadora, Lucía Corpacci, recibió ayer a la Asociación Olivícola de Catamarca que preside Francisco Corredoira, quienes plantearon su preocupación con relación a las posibles consecuencias del Tratado de Libre Comercio, firmado entre el Mercosur y la Unión Europea, que reduciría los aranceles de ingreso de aceite de oliva del viejo continente, afectando seriamente al sector productivo local.
ministro Daniel Zelarayán, Produccion Daniel ZelarayánCorpacci se comprometió a realizar gestiones con los legisladores nacionales para elevar el planteo a la Nación.
Corredoira expresó que la reunión fue positiva. También se trató la nueva tarifa de energía que se implementará para el sector. En este caso, los empresarios del sector olivícola quieren analizar cuál será el impacto en cada una de las empresas. Luego tendrán la posibilidad de dialogar con la EC SAPEM.
En la audiencia por el aumento del VAD la empresa de energía planteó una tarifa diferencial para aquellos productores que utilicen el riego por bombeo. La medida beneficiará principalmente a los productores olivícolas de la provincia. Anteriormente, los usuarios agrupados en la categoría T4 (Riego Agrícola) pagaban una tarifa fija independientemente de lo que consumían. De esta manera, ahora abonarán la energía que efectivamente usen.
Debido a esto los productores tendrán un ahorro en el costo de producción. Actualmente, casi el 40% de los gastos corresponden al pago de energía», había explicado el ministro Daniel Zelarayán.
Por otra parte, Corredoira explicó que no se abordó en la reunión la problemática por la cosecha olivícola que será menor en relación con la del año pasado.
Preocupación
La preocupación de los empresarios olivícolas se sustenta en el impacto que tendría la disminución de los aranceles para el aceite de oliva que ingresaría de la Unión Europea.
En ese sentido, la Federación Olivícola Argentina, a la que adhiere Asolcat, informó que actualmente, a nivel país, unas 40.000 familias dependen de la producción olivícola en forma directa e indirecta.
Con estas cifras, la FOA quiere demostrar «la importancia de la olivicultura argentina y de la magnitud de los perjuicios que ocasionaría la inclusión del aceite de oliva en el acuerdo».
Pero la FOA también expuso cómo es realmente la situación actual de los productos que entran al país desde Europa. En ese marco, explicó que el arancel compensatorio para el ingreso de aceite desde la UE es del 31,5%. La cifra fue establecía por el Mercosur en los ´90, ante la falta de competitividad frente a los subsidios de la UE. El máximo permitido por la Organización Mundial de Comercio es del 35%.
Por su parte, los subsidios que reciben los productores en la comunidad europea ronda entre el 20 y el 35% del valor del producto.
«Con los argumentos esgrimidos queda más que claro cuál es el temor de los olivicultores frente a un gigante productor y envasador como lo es la Unión Europea, que no repara en otorgar a sus industrias ayuda necesaria para mantener su actividad a flote y conquistar nuevos mercados, mientras que nosotros vemos cómo se nos escapa de nuestras manos el principal mercado del destino de nuestros productos con valor agregado, tal como ocurrió con el acuerdo Mercosur-Egipto puesto recientemente en vigencia que nos restó el 40% del mercado vecino».


