Organizado por la Cámara de Diputados a través del Observatorio de Derechos Humanos, Género y Diversidad, se llevó adelante el conversatorio “40 años de Democracia”, un espacio para reflexionar sobre un capítulo fundamental en la historia de nuestro país, cuando se dejó atrás la dolorosa etapa de la dictadura cívico-militar y se recuperaron derechos civiles y políticos.
En la jornada de ayer lunes, el panel compuesto por la presidenta de la Cámara baja, Cecilia Guerrero, la senadora nacional Lucía Corpacci, el diputado José Sosa, el secretario de Derechos Humanos de La Rioja, Delfor Brizuela, y el gestor cultural y promotor de espacios colectivos, Oscar Nemeth, ofrecieron una mirada amplia sobre el tema y coincidieron en la importancia de defender el sistema democrático.
Durante su alocución, Guerrero, observó cómo puntuales medios de comunicación y el Poder Judicial desempeñaron un papel crucial en la legitimación de la Dictadura y en la pérdida de vidas y libertades. También señaló que “a 40 años de la primera elección que habilitó la recuperación de la democracia, quiero recordar las palabras de Raúl Alfonsín cuando decía, en un llamado tácito a la unidad nacional que hoy también proclamamos desde los sectores populares: `Hemos ganado una elección pero nadie fue derrotado porque todos los argentinos recuperamos los derechos ´”. En este sentido, remarcó que “por nuestros derechos, por los derechos de los que vendrán, de los jóvenes, niños y niñas, debemos trabajar fuertemente para seguir construyendo democracia, justicia social, en un país que nos hermane en la unidad nacional a la que debemos convocar verdaderamente a todos y todas las argentinas”.
Por su parte, Corpacci compartió sus vivencias personales y recordó los desafíos que enfrentaron quienes vivieron la dictadura. También destacó la importancia de vivir en democracia, donde las personas pueden reclamar por sus derechos sin poner en peligro la vida: “Es importante vivir en democracia porque es el único sistema que nos permite tener derecho de salir a reclamar cuando vulneran nuestros derechos sin que peligre nuestra vida, hijos o amenacen con meternos presos». Además, comentó que aún tiene en su memoria cuando el 24 de marzo de 2004, Nestor Kirchner bajó los cuadros de los dictadores Jorge Rafael Videla y Reynaldo Bignone, que estaban colgados en una de las galerías del Colegio Militar. Corpacci rescató que Alfonsín, en uno de sus discursos, “dijo que las oligarquías vienen siempre a pesar que los dueños de las empresas o el dinero tienen que ser los dueños del Estado y quiero que eso llame a la reflexión porque el dueño del Estado es el pueblo a través de las instituciones democráticas que la representan”.
En tanto, Sosa recordó el contexto de la recuperación de la democracia, indicando que fue un proceso ejemplar ya que fue un momento en el que todos las y los argentinos ganaron: “Fue electo Alfonsín, pero nadie derrotó a nadie, no había vencedores y vencidos, todos ganaron, ganó la Argentina, volvió la libertad”. El legislador también señaló las paradojas de la historia ya que “hoy reflexionamos sobre el inicio de la recuperación de las instituciones en contra la dictadura, que se fue pero no desapareció, siguió sobreviviendo en sus conceptos políticos y económicos”. En este sentido afirmó que “hay un hilo conductor que no se cortó nunca y nosotros hoy lo estamos padeciendo. Javier Milei no es solo un outsider de la política, es el continuador de la conceptualización económica y social de la dictadura militar”. Así, contempló que “los movimientos nacionales y populares como el Peronismo y la Unión Cívica Radical” deben ir en defensa de la democracia puesto que “estamos definiendo en este país el futuro de la patria”.
A su turno, Brizuela remarcó que la recuperación de la democracia no fue una concesión de la dictadura, sino el resultado de la lucha del pueblo argentino, de la valentía de las Madres de Plaza de Mayo y del resurgimiento de la clase trabajadora, entre otros factores. “La dictadura llegó tratando de legitimarse con una construcción de sentido que procuró homogeneizar, que su discurso era `esto es un desastre, los políticos son un desastre, la violencia de los zurdos´ y que tiene un parecido con la realidad de ahora” expresó. En este orden de ideas, el funcionario de la vecina provincia trazó las similitudes con los desafíos actuales y cómo la democracia debe evolucionar y mejorar para el bien de la nación. Por su parte, Nemeth, señaló cómo la sociedad en el pasado fue transformada en meros consumidores de cultura foránea, y abogó por apoyar a los artistas y creadores locales que trabajan en circuitos alternativos, enriqueciendo así el patrimonio cultural del país.