El diputado provincial Maximiliano Rivera presentó un proyecto de ley mediante el
cual se propone la prohibición de circulación a vehículos con tracción a sangre en
nuestra provincia.
En ese sentido, el legislador expresa: “Muchos trabajadores comúnmente
denominados ‘carreros’ o ‘cartoneros’ utilizan animales como medio de tracción y
transporte del material recolectado, y generalmente se trasladan en condiciones
sumamente precarizadas”.
“El uso de vehículos de tracción a sangre es una tarea por demás riesgosa para los
propios trabajadores y para terceros, a la vez que trae aparejado serios
inconvenientes en el tránsito. Por ello, resulta necesario generar una mejor calidad de
vida para esas familias, así como también articular actividades en el marco de un
programa integral con el propósito de que, a través de la intervención del Estado
Provincial, puedan promoverse beneficios éticos, ambientales, sociales y económicos
para los recolectores informales y para la Provincia”, señala.
“Este proyecto pretende terminar de forma definitiva con los vehículos de tracción a
sangre en todas sus formas, poniendo especial atención en el cuidado y protección
de los animales y en la recuperación de la dignidad laboral de las personas”.
Mediante el articulado, el diputado Rivera propone instituir el Programa de
Reemplazo de Vehículos de Tracción a Sangre, que tendrá como objetivo primordial
establecer las bases a fin de lograr la paulatina prohibición de circulación y
utilización, en todas sus formas, de animales en el tiro de vehículos en el ámbito de la
provincia.
La prohibición de circulación y utilización en todas sus formas de animales en el tiro
de vehículos de tracción a sangre se aplicará gradualmente, una vez que la autoridad
de aplicación informe la implementación y ejecución del plan de reconversión,
asistencia y capacitación de los propietarios o tenedores de carros con tracción a
sangre.
Además, el objetivo general es establecer una estrategia provincial que aborde de
forma íntegra y coordinada la problemática de la tracción a sangre, en busca de
mejorar la calidad de vida de los trabajadores y de los animales involucrados.
En cuanto a los objetivos particulares, plantea:
a) Erradicar el trabajo infantil y mitigar las condiciones de inseguridad y precariedad
en el trabajo de recolección informal de residuos urbanos o similares.
b) Asistir a los trabajadores informales otorgándoles capacitación laboral y establecer
un seguimiento que permita el reemplazo del vehículo de tracción a sangre.
c) Propiciar escenarios que permitan la recolección y gestión integral de los residuos
sólidos urbanos.
La autoridad de aplicación debe:
– Convocar y liderar una mesa de diálogo intersectorial y dictar su correspondiente
reglamento de funcionamiento.
– Suscribir convenios con los diferentes municipios, universidades, organizaciones de
la sociedad civil, empresas y/o colegios profesionales para la implementación de la
presente ley.
– Elaborar informes periódicos del funcionamiento del programa.
– Coordinar acciones con los ministerios, secretarías o subsecretarías u otras que
puedan encontrarse involucradas en el abordaje de la problemática de la tracción a
sangre, facilitando la aplicación y cumplimiento de la presente.
– Diseñar y aplicar acciones de difusión y concientización acerca de la importancia de
abordar de forma integral la problemática de la tracción a sangre.
La autoridad de aplicación deberá arbitrar los medios para facilitar la capacitación y
sustitución de vehículos de tracción a sangre por otros vehículos de tracción motora
que ofrezcan una alternativa laboral superadora a través de la creación de
programas.
