
La denuncia
Donato denunció que mientras era empleada de Bacchiani en Córdoba, eventualmente cumplía funciones de empleada ejecutiva en esa sucursal. Explicó que al igual que centenares de ahorristas le entregó a la empresa una suma importante de dinero, confiando en que cobraría las utilidades prometidas.
Ante la imposibilidad de cobrar las cuotas pautadas y de recuperar el capital, contactó a Retamozo para solicitarle información sobre el destino del dinero a cambio de información sobre la empresa que ya contaba con denuncias por estafas. La falta de respuestas de Retamozo puso en alerta a Donato, quien se comunicó con Aydar -representante de acreedores en varias provincias-, a quien pidió denunciar a Retamozo.
Según su relato, tras plantearle la situación el abogado tucumano le prometió que intervendría en la causa a su favor, y radicaría una denuncia penal contra Retamozo.
Pasaron los meses, el dinero no apareció y la denuncia no fue realizada. Donato se contactó nuevamente con Aydar a quien exigió una explicación, y éste le habría contestado a través de un mensaje de WhatsApp: «Vos muda. Vos querellante y punto”.
En diálogo con El Ancasti, Donato remarcó: «Yo cumplí mi parte del trato (con Aydar y Retamozo), les pasé toda la información. Ellos no cumplieron su parte, me tenían que representar y me dejaron en bolas jurídicamente. Si mi abogado me bloquea, me escracha, se entera que lo denuncio a Retamozo y me manda a llamar para que frene la denuncia, ¿qué puedo pensar?”.
A mediados de enero, Aydar se manifestó a favor de la excarcelación de su colega Retamozo, y la Justicia no le hizo lugar. Aydar prestó su acuerdo para que se le otorgue la libertad o la prisión domiciliaria: “(…) No formularé oposición a la excarcelación, considerando la valoración provisional de los hechos y la conducta asumida por el imputado al momento de su detención”.