El enojo que evidenció Fernando Capdevila el pasado miércoles durante una entrevista radial cuando se le preguntó sobre el Estadio Bicentenario encontró respuesta desde el oficialismo provincial.
“¡Siempre me preguntan lo mismo! No sé, no escuchan o no sé qué pasa. Yo no tengo nada que ver, no voy a contestar sobre el Estadio. No tengo nada que ver, diríjanse a la empresa, al Gobierno o a la Justicia para saber qué está pasando”, había dicho Capdevila, actual titular de Anses.
Una de las respuestas más resonantes al funcionario nacional fue la del diputado del Frente Justicialista para la Victoria (FJPV) Augusto Barros, quien lamentó “tener que hacer una nota sobre esto, que más que el ‘Coloso de la loma’ es el coloso de la corrupción de Catamarca”.
“Probablemente Capdevila se siente molesto cuando tiene que responder a la responsabilidad que le cabe por haber estado al frente de la empresa que construyó al estadio”, comentó Barros.
“Más ofuscada debe estar la gente de Catamarca de ver cómo una obra con recursos de la Provincia termina de esta manera”, puntualizó.
En ese mismo sentido, Barros dijo en declaraciones a la TV Pública que “él –por Capdevila- manifiesta que no tiene responsabilidad, pero estuvo al frente de la empresa”. “Ha dicho que le consultemos al Gobierno, como si el Gobierno de la Provincia tuviera responsabilidad en la construcción de este estadio”. En cuanto a la Justicia, “seguramente se va a expedir, pero no nos olvidemos que hay algunos amigos de Capdevila en la Justicia, lo que también puede llegar a ser preocupante”.
El referente del FJPV puntualizó que “por supuesto que no quieren hablar de algunas cosas, no las quieren tocar, pretenden acusar permanentemente”. “En verdad, tampoco soy muy afín a entrar en un diálogo acusatorio de cosas que han ocurrido, pero ante determinada situación a uno lo empujan contra la pared y tiene que responder, porque no puede ser que simpáticamente el referente de Anses se manifieste con tal falta de sinceridad y una irresponsabilidad absoluta”.
Finalmente, el legislador provincial hizo una comparación al indicar que, por ejemplo, Grecia o el Imperio Romano debieron esperar siglos para tener ruinas, pero que “aquí, en Catamarca, pasaron solamente un par de años para poder tener una ruina de la corrupción reinante durante mucho tiempo”.