En una agobiante jornada de calor en Catamarca, el Frente de Todos, es decir el
oficialismo provincial, no transpiró la elección con un resultado casi similar al de las
PASO. Hasta el cierre de esta edición, el escrutinio provisorio había computado el
94,42 por ciento de las mesas, números que ratifican que el intendente de la Capital,
Raúl Jalil, gobernará la provincia por los próximos cuatro años después del 10 de
diciembre.
Sucede que el conteo de los votos arrojaba una diferencia importante a favor de la
fórmula Jalil-Rubén Dusso por encima de la opción de Juntos por el Cambio, Roberto
Gómez-Lía Quiroga. El casi 95 por ciento de las mesas contadas de esta votación
arrojó para la fórmula oficialista el acompañamiento del 60,39 por ciento (125.634
votos) sobre el 33,47 por ciento de la propuesta opositora (69.631 sufragios).
Es decir, una diferencia de 27 puntos o, en otras palabras, 56.003 votos menos para
Juntos por el Cambio.
Este resultado implica que a fin de año tanto la nación como la provincia serán
aliados políticos. Ahora bien, curiosamente el electo presidente de la nación, Alberto
Fernández, sacaba menos votos en la provincia que Jalil: 1368 menos para el electo
presidente.
Lo mismo sucedía dentro de Juntos por el Cambio aunque la diferencia era mayor. Es
decir, mientras la fórmula Gómez-Quiroga cosechaba casi 70 mil votos, el presidente
Mauricio Macri los superaba por 4.942.
Por otra lado, en un tercer lugar quedaba el candidato de Consenso Federal y actual
diputado provincial, Hugo “Grillo” Ávila. El legislador cosechó 9.114 votos a su favor
(un 4,38 por ciento).