En 2017, Microsoft modificó por última vez la tipografía que venía por defecto en Office. Tras varios años usando la letra ‘Times New Roman’, la empresa la dejó de lado para fijar ‘Calibri’ como fuente predeterminada. Han pasado 15 años desde aquel momento y parece que ha llegado el momento de modernizarse otra vez.
Microsoft ha encargado cinco nuevos tipos de letra ‘sans serif’ personalizadas y está pidiendo ayuda a los usuarios para decidirse por una. Aquellas personas que quieran probarlas ya pueden hacerlo en Microsoft 365.
Las tipografías diseñadas para Microsoft han sido bautizadas como ‘Tenorite’, ‘Bierstadt’, ‘Skeena’, ‘Seaford’ y ‘Grandview’. Todas ellas apuestan por diseños humanistas, geométricos, suizo e industrial. Además, pueden parecer muy similares entre unas y otras, pero es cierto que hay diferencias.
Microsoft las define de la siguiente manera:
● Tenorite (Erin McLaughlin y Wei Huang): Tiene el aspecto general de una fuente tradicional sans-serif (como Times New Roman), pero con un estilo más cálido y amigable. Los puntos grandes, acentos y puntuación hacen que la tipografía sea más cómoda a la hora de leer formatos pequeños en la pantalla. Asimismo, las formas nítidas y los caracteres anchos crean una sensación de apertura.
● Bierstadt (Steve Mattison): Está inspirado en la tipografía suiza de mediados del siglo XX. Se trata de un tipo de letra versátil que expresa la sencillez y la racionalidad de una forma muy legible, además, las terminaciones de sus trazos enfatizan el orden y la moderación.
● Skeena (John Hudson y Paul Hanslow): Basada en las formas de los tipos de texto con serif tradicionales, sus trazos son modulados y tienen un contraste entre lo grueso y lo fino. Se trata de una fuente que encaja perfectamente en cualquier tipo de texto, ya sean presentaciones, folletos o informes.
● Seaford (Tobias Frere-Jones, Nina Stössinger y Fred Shallcrass): Tiene sus raíces en el diseño de los antiguos tipos de texto con serif y por ello provoca familiaridad. Sus formas orgánicas y asimétricas ayudan a la lectura para resaltar las diferencias entre las letras.
● Grandview (Aaron Bell): Derivado de la clásica señalización alemana de carreteras y ferrocarriles, ahora se ha diseñado para su uso en el cuerpo del texto, pero conserva las mismas cualidades de alta legibilidad para la lectura en formato largo.
La fuente ganadora que se convertirá en predeterminada se dará a conocer en 2022, mientras tanto, Microsoft tendrá en cuenta las opiniones de los usuarios para llegar a una conclusión.
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