El exconvicto por femicidio Pablo Fernando Angelina fue detenido en la provincia de Tucumán, donde se ocultaba de la justicia, en esta ocasión, por el delito de desobediencia judicial. Durante poco más de un mes estuvo prófugo y en ese ínterin, recibió varias denuncias por presuntas amenazas, intimidaciones y también suplantación de identidad en redes sociales.
La policía contaba con orden de detención desde el 5 de diciembre pasado, emanada por la Fiscalía de Instrucción Nº 1 a cargo de Víctor Figueroa. Angelina, denunciado por amenazas y maltratos a su familia y con exclusión de hogar, eludió la prisión preventiva ofreciendo internarse en una clínica psiquiátrica, pero incumplió y se fue del lugar.
La División de Investigaciones de la policía local estaba abocada a su búsqueda. Según se pudo conocer se realizaron arduos trabajos de inteligencia. Desde hacía varios días, lograron conocer que Angelina se encontraba en Tucumán, por lo que pusieron en conocimiento a sus pares de la vecina provincia. Ayer alrededor de las 11.30, los uniformados tucumanos lo cercaron mientras estaba en la Plaza Independencia y lo detuvieron por contar ya con el requerimiento. Fue alojado en una dependencia a la espera del exhorto para su extradición.
Fuentes consultadas señalaron que el trámite para que la comitiva policial viaje a traer a Angelina ya está en marcha y se concretaría la semana que viene.
Las mismas fuentes indicaron que el detenido no tiene un trabajo fijo “ni se dedica a algo en especial, más bien trata de conseguir laburo de lo que puede, tiene una mentalidad peligrosa y manipuladora, es un perfil delictivo potencial”, toda vez que consideraron que se trata de alguien peligroso.
Desde que El Esquiú.com dio a conocer en exclusiva que estaba prófugo de la justicia, a través de Facebook, Angelina intentaba despistar a los sabuesos policiales con posteos con fotos y ubicaciones falsas sobre su paradero.
Más denuncias
Recientemente, ingresaron al menos tres denuncias nuevas en su contra. Las mismas fueron efectuadas por su hermano Ricardo Angelina, por la madre de Luciana Farías, Cristina Saed y por el dirigente político chacarero, Roque Molina.
En el caso del abogado Ricardo Angelina, habría denunciado a la justicia que su hermano le enviaba mensajes (que el propio acusado se encargó de publicar en Facebook) intimidatorios, haciendo caso omiso a la orden de restricción impuesta por la justicia luego de la primer denuncia por maltratos y amenazas.
Cristina Saed, quien perdió a su hija Luciana Farías en circunstancias no esclarecidas en Brasil luego de mudarse allí con Angelina, también hizo una acusación penal. Luego de una publicación de El Esquiú.com por cumplirse un año de la muerte de su hija, comenzó a recibir mensajes intimidatorios vía Facebook, de perfiles falsos, donde simulaban ser un estudio jurídico tucumano. Allí, le ordenaban a la mujer no hablar más del caso.
Por último, el dirigente político Roque Molina también denunció a Angelina, por suplantación de su identidad para realizar amenazas. Además de la acusación en Fiscalía General, Molina explicó la situación en su Facebook. “A todos mis contactos […] les comunico que existe una cuenta trucha que lleva mi nombre y una foto antigua, creada por el delincuente y asesino de mujeres Pablo Angelina, por lo que desconozco cualquier acción contraria a derecho que se realice desde dicha cuenta”, publicó.
Enojado
Luego de la publicación del 28 de diciembre pasado de El Esquiú.com, donde de forma exclusiva se informó que estaba prófugo, Angelina realizó varias publicaciones intentando desmentirnos y parodiando nuestras tapas.
